Capítulo 9
(Flashback)
-¿ no podrás perdonarme verdad?
-
No.
…………
Ese desagradable sabor amargo me
inunda el paladar, y durante unos instantes el aire se vuelve espeso,
irrespirable a mi alrededor.
Tras el shock de la sorpresa llega
la decepción, e instantes después el rechazo y la repugnancia.
Todas esas emociones cruzan mi
mente en los escaso segundos en los que el nuevo vigilante de los juegos posa
bajo la potente luz de los focos.
El compañero, el amigo, el amante,
el desahogo, el cazador , el rebelde… el vigilante…. Gale…
¿Qué ha ocurrido? ¿ qué ha pasado
durante estos 20 años?...
Quién sabe…, ahora solo sé que tras
años en el anonimato vuelve para encarnar al que será el verdugo de mi familia
y que debo enterrar cualquier sentimiento de añoranza y afecto hacia su
persona… Ahora solo puede anidar en mi corazón el odio.
Gale sonríe, diplomático, a las
cámaras, que lo rodean como gigantes de hierro. Tras el caluroso aplauso de sus
compañeros, el vigilante ocupa el trono reservado en el centro del mostrador.
Sus aire de superioridad y la arrogancia que irradia a cada movimiento me
provocan nauseas. No será difícil odiarlo. El Gale que cazaba conmigo en los
bosques murió hace tiempo…
El vigilante se inclina sobre el
pequeño micrófono que le han ofrecido y tras pulsar un botón su potente voz se
proyecta y amplifica en los altavoces.
-¡Buenos días queridos tributos y
bienvenidos al Capitolio¡ Espero que el viaje haya sido de vuestro agrado.-
siento mi piel temblar bajo las ropas.- me he tomado el privilegio de ser yo
quien os explique el transcurso de los siguientes días aquí en la ciudad
capital. Supongo que todos seréis conscientes ya de la futura celebración de
unos maravillosos septuagésimos juegos del hambre, en los que por fortuna, seré
yo el vigilante y también supongo que adivinareis el rostro de sus tributos. Aún
así es un gran orgullo para mí, y
supongo que para todos aquellos vencedores de otro años comunicarles- el
crepitar del micrófono se apodera de la sala. Reprimo las nauseas- ¡que serán sus hijos quienes tengan la
inmensa suerte de defender su honor sobre la arena de estos Juegos¡
Gritos, puños al aire, manos
desesperadas y una patrulla de agentes intentando contener a una inmensa masa
de gente, que unida por la angustia, intente abordar el escenario. Tal como
preveía.
Sin embargo yo permanezco inmóvil
en un extremo de la sala, apretando sus
pequeñas manos entre mis dedos. Hagan lo que hagan no cambiarán nada pues el
Capitolio ya ha decidido. Siento que el último aliento de vida se escapa de mis
labios.
Los guardias no tardan demasiado en
sofocar a los vencedores tras encañonar
sus frentes con las armas. Seguidamente y para evitar otra posible unión entre
los desesperados vencedores cada agente se adjudica una familia y la conduce
fuera de la estancia, hacia sus respectivas habitaciones. Ahora son las lágrimas
y la impotencia quienes se manifiestan libremente en los rostros de aquellos
que deberán entregar a sus hijos a la arena.
Un hombre rechoncho, ceñido a un
ajustado mono blanco, se aproxima hacia nosotros con petulancia, mientras nos
estudia tras el cristal de su casco.
-Acompáñenme.
Acatamos la orden en silencio y
tras atravesar angostos corredores alcanzamos lo que parece ser nuestro futuro
aposento.
-Entren-insta mientras su gruesa
mano enfundada gira el picaporte.
El interior del dormitorio es muy
amplio. La parte central está ocupada por una cama oculta tras el tupido velo
de un dosel. A ambos lados de esta yacen, dos camastros de gruesos colchones.
En un extremo de la sala una puerta entreabierta deja adivinar un pequeño baño
de azulejos blancos.
-
Qué bonito.
Por momentos olvide que estaba
acompañada. Durante unos instantes me perdí en el pasado al amparo de la
soledad.
-
Si lo es Prim- sonrie Peeta mientras
acaricia su rostro.
-¡Yo quiero la cama grande¡
Gale se abalanza sin piedad,
apartando las cortinas, sobre el mullido colchón.
-¡Y yo¡
Estudio bien la escena, quizás la
última, memorizo cada palabra, grabo cada instante y me preocupo de ocultarlos
en un rincón de la mente que nadie pueda profanar, que sea solo mío. Lejos del
veneno del Capitolio.
-
Señora Everdeen – no puedo evitar un
sobresalto- le importaría acompañarme.
Un nuevo agente de la paz se
perfila en el marco de la puerta.
-
¿Qué pasa ahora?- Peeta, desafiante, se
interpone entre ambos- ¿A dónde te la llevas?
Me apresuro en aferrar su hombro,
en un intento tranquilizador y lentamente lo aparto de la puerta.
-Enseguida vuelvo.
Ni yo me lo creo… pero no importa,
¿qué decir si no?....
El agente me invita a abandonar la
habitación con un amplio gesto. Conforme
avanzamos por el pasillo dos voces inocentes gritan su pequeña despedida.
-¡Adiós mami¡
El eco resuena en el pasillo,
entonando una melodía que lentamente expira en mis odios.
Adiós pequeños….
El agente extiende el brazo bloqueando el paso
y obligándome a retroceder. Nos encontramos erguidos frente a unos amplios
portones de madera esculpida. A ambos lados de la puerta, dos ángeles de piedra
otean el corredor y guardan la entrada. Sus ojos de cristal, escrutan la
oscuridad del pasillo y sus labios inertes se tornan en una macabra sonrisa.
Hemos alcanzado la parte más lujosa del edificio.
-Ya hemos llegado-
confirma el guardia mientras empuja con suavidad la puerta- Entre.
Y entro sin meditar ni
un instante, sin detenerme a pesar mis posibilidades.
El interior de la
estancia está decorado con un gusto exquisito, muebles de caoba, libros encuadernados en piel, alfombras
exóticas…
En el centro del
despacho, erguido en un sillón se perfila a contraluz su robusta figura.
Despiadado, cruel,
sobrehumano… de cuantas maneras podría describirlo, pero en estos instantes
solo brota una palabra de mis labios, solo un sentimiento…
-
Me das asco- no pienso ni especulo,
ahora estoy frente a él con el alma desnuda y herida reflejada en los ojos.
Ahora estoy indefensa, mostrando finalmente la humanidad que creí haber
perdido.
Una
cruel sonrisa se dibuja en sus labios.
-Te
estaba esperando.
Bien dicho Katnnis!!! A mi también me da ascooo!!!! Solo espero, que en el fondo,siga siendo el Gale de siempre...
ResponderEliminarMe encanta el capítulo!! Cada vez me gusta más! Se te ocurren muy buenas ideas!!
Graciaas por darte prisa en escribirloo!
Un besoo
muchisimas graciass¡¡¡ un besazoo :)
EliminarNo me gusta enterarme por el blog de que has escrito nuevo capitulo ¬¬ eso no se HACE jajaja dejando atrás el rencor que ahora mismo siento hacia tu persona decirte que....
ResponderEliminar(Ruidos de tambores)
me encanta!! ^^ jajaja te gusta hacernos sufrir no? ya has conseguido que todos odiemos a Gale, ya no volvere a pensar igual de él jajaja
Sigue escribiendo chata que ya sabes que me encantas ;D <3
gracias lolitaaaa, era una sorpresa mujer ;)
EliminarEl esperado encuentro entre Katniss y Gale... Me vas a tener con la intriga hasta que publiques el siguiente. ¿Tendrá algo importante que decirle a Katniss o solo se va a regodear de su "éxito"? Estoy de acuerdo con cereza, da asco pero seguiremos esperando que conserve parte de su humanidad al menos.
ResponderEliminarUn beso Natalia ^^
ahora es el momento de que yo chuleo un poco... Yo ya lo he leído muajajaja :) merece la pena esperar :D
Eliminarun beso a ti tambien y muchas gracias por tus comentarios hoy mismo lo adivinarás :)
ResponderEliminarHe leido todos tus capitulos y son increibles, enserio :O. Sigue así y llegaras lejos ;)
ResponderEliminarmuchas gracias¡¡ ya me pasare a visitar tu blog :)
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